NO NACEMOS SABIENDO

NO NACEMOS SABIENDO


Podemos corregir los malos hábitos adquiridos del perro, pero lo más importante después de la labor del adiestrador es dar pautas de conocimiento a los dueños, ya que el avance obtenido por el perro bien merece  la pena que esa inversión y sacrifico perdure en el animal.

Cada perro tiene unas características especiales que lo hacen diferente, inclusive dentro de la misma raza. Es muy importante aprender a conocer a nuestro nuevo miembro de la familia para así tener una mayor armonía en el hogar.

Verdaderos profesionales os ayudarán a afrontar vuestras dudas en la educación y enseñanza de vuestra mascota. Qué mayor alegría puede ser ver cómo nuestro pero es feliz, corre con libertad, sin miedos, sin angustias…
El perro no sabe, no comprende lo qué está bien o mal, él sólo quiere complacernos, pero hay casos que por bloqueos o miedos no sabe cómo responder a nuestras órdenes como en una simple llamada.

Nos  podemos desesperar ante tal frustración, no comprendemos cómo algo “tan fácil” no lo hace. Entre tal cúmulo de nervios y angustia podemos tomar posturas ante él no apropiadas, aunque en ese momento pensemos que eso es lo más adecuado. Esos “pequeños” pasos pueden llegar a adquirir comportamientos en cadena con nuestro perro. De ahí que os aconsejamos tener las cosas claras a la hora de estar con él, que los nervios adquiridos por esas frustraciones no os rebosen, o mejor que desaparezcan, ya que eso empeorará notablemente el comportamiento de vuestro perro.